13 nov 2013

Réquiem por el revelado de fotos.

La National Gallery de Canadá ha decidido entonar un réquiem por la muerte casi inevitable del revelado de fotos, el trabajo de laboratorio en el cuarto oscuro y la película química. Tiene dos exposiciones relacionadas con el paso de la película fotográfica a la industria digital, que permite a cualquiera hacer una foto aunque nada sepa y nada sienta sobre la fotografía, hasta el 5 de enero de 2014.

De las dos, la que más me llama la atención es Icons of Obsolescence, una serie del fotógrafo canadiense Michel Campeau sobre la destrucción por abandono de cuartos oscuros, cámaras, equipo de laboratorio y bombillas de flash de un solo uso de 75 instalaciones en países de todo el mundo. En ocasiones las cámaras oxidadas, casi irreconocibles, parecen esculturas y los restos del naufragio de un laboratorio podrían ser un cuadro abstracto.

El autor, dicen desde el museo, mezcla el documental artístico con la nostalgia, la claridad de la razón, la intencionalidad y el azar. Las fotos son un recordatorio de la enorme transformación que se ha producido en poco más de una década para uno de los medios más accesibles y ubicuos de la humanidad.

Sí, me he sentido como un experto forense en la escena de un crimen...
...dice el fotógrafo. La evidencia de la creatividad, lo doméstico y el abandono estaban a mi alrededor: instalaciones maltratads, sistemas de ventilación inservibles, folletos de instrucciones, la contaminación ambiental, los derrames químicos, el equipo desgastado y algunos temporizadores que seguían funcionando, como marcando el tiempo que resta para la desaparición del cuarto oscuro.

Tenéis un artículo completo aquí.

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